En 2014, el Wall Street Journal agregó una barra de menú tridimensional permitiendo descargar un archivo para una impresora tridimensional que la "imprimiera". Acompañaba la presentación de la impresora MakerBot Replicator Mini y mostraba la evolución de las ventas de impresoras 3D. Otro archivo permitía ver en un smartphone la barra impresa a modo de realidad aumentada con la app Augment (imagen al lado). (Niemann Lab, 18/6/2014).
Es evidente que no aportaba mucho más que un clásico gráfico bidimensional, pero debería ser recordado como una primera exploración de "periodismo impreso tridimensional".
La impresión 3D no está, por ahora, al alcance de todos los usuarios de internet y las máquinas son aún relativamente caras. Existen sin embargo algunas que podrían ser útiles en el ámbito educativo, como la Minitoy 3D, "de fácil uso para los niños", lanzada en Kickstarter. Sin duda se podría pensar en reportajes acompañados de archivos de impresión 3D para reproducir la maqueta de algún invento o aparato históricamente relevante. ¿O incluso la cabeza de un político? (Imagen de Informática Hoy)
Parecen pensarlo en la Ryerson School of Journalism de Canadá, donde los estudiantes experimentan con ella.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
No se reciben comentarios.
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.